La violencia nunca es espontánea, como tampoco es espontáneo lo de Torre Pacheco. Los discursos antimigratorios buscan justamente este tipo de estallidos y, o se toman en serio, o se lamentarán noches de cristales rotos.
Comentar:
0
Ver normas
Ver tus comentarios en tu perfil
!
Los comentarios de esta noticia están
cerrados
Regístrate
ya tengo cuenta
Rellena tu nombre y apellidos para
poder comentar
completa
tus
datos
!
Comenta con respeto, tu opinión se
publicará con nombres y apellidos